El jamón ibérico es un alimento muy nutritivo que debe formar parte de una dieta completa y equilibrada. Lejos de criminalizar este producto por su contenido en grasas, lo que debemos hacer es valorar su alto contenido nutricional.
Proteína de calidad y grasas saludables
El jamón ibérico Manchenieto es uno de los alimentos que presenta mayor proporción de ácido oleico. Este ácido graso saludable reduce los niveles de colesterol LDL (el malo) y aumenta los de LDL (el bueno). A esto se añade su alto contenido proteico. 100 gramos de jamón ibérico aportan 43 gramos de proteína de alto valor biológico y solo 160 calorías. Además es un alimento muy saciante que ayuda a mantener la masa muscular.
El 90% del jamón es proteína de alta calidad y solo el 10% son grasas, además son saludables. Este producto se puede utilizar como sustituto de otras carnes más grasas. En cocina se puede utilizar como aperitivo o formando parte de primeros platos: tortillas, con guisantes, con champiñones, con verduras o en ensaladas.
Alimento rico en en vitaminas y minerales
El valor proteico y su contenido en grasas saludables son los motivos nutricionales que más invitan a consumir jamón ibérico Manchenieto de manera habitual. Sin embargo, este alimento ofrece también al organismo un aporte interesante de vitaminas, especialmente del grupo B (B1, B2, B3 y B6), y las vitaminas D y E, todas ellas necesarias para mantener en buen estado de funcionamiento el sistema nervioso y el cerebro.
Los minerales están igualmente presentes en este producto. Consumir 100 gramos diarios de jamón ibérico Manchenieto cubre el 20% del hierro diario necesario que necesita tomar una mujer. Zinc, magnesio o calcio son otros minerales necesarios para el organismo y también están presentes en este producto.
Las posibilidades del jamón ibérico en gastronomía son infinitas. No obstante, su consumo debe ir de la mano a mantener un equilibrio nutricional y calórico con el resto de alimentos en la dieta y hábitos saludables en el día a día.
